Cuando «Mediterráneo Antiguo» evolucionó a «Legado griego» me fijé como propósito la necesaria especialización en un área ya saturada de oferta divulgativa como era la de la Antigüedad. En los albores de esta aventura, hacia el año 2008, cuando las redes sociales apenas habían irrumpido en el panorama español, tenía sentido una propuesta generalista, pero a medida que fueron surgiendo nuevos proyectos, cada vez más ricos e interesantes, la aportación de valor tenía que venir de la mano de la profundización en un área concreta. Por ello elegí el mundo heleno, mi principal foco de interés y estudio en los últimos años.

Tengo la convicción de que una propuesta divulgativa que lleva el nombre de «Legado griego» no puede limitarse al mundo antiguo. Al fin y al cabo, la palabra «legado» remite a la herencia que nos dejaron aquellas gentes, manifestada en un tiempo posterior al de la gestación de tal acervo. Es por ello que, si bien mantendré el foco en la Antigüedad, en esta nueva etapa empezaré a introducir contenidos relacionados con otras épocas históricas, en las que la recepción del mundo griego haya jugado un papel decisivo.

Este renovado propósito se fundamentará, como hasta ahora, en una propuesta divulgativa basada en el rigor; en la humildad; en el respeto que profeso a los historiadores y arqueólogos, a los que admiro profundamente; en la sincera colaboración con otros proyectos semejantes y en la combinación de diferentes medios y soportes para llegar al público generalista. «Legado griego» amplía sus horizontes con la misma ilusión de los primeros días y con una colaboración de excepción que muy pronto conoceréis.

Os espero en este largo y apasionante viaje.

Mario Agudo Villanueva